Embarazoz
Ebarazo de alto riesgo
Cirugia plastica Ginecologica
Correccion de incontinencia urinaria
Detección oportuno de Cancer
Histerectomias ( cirugia de la matriz)
Cirugia de Ovarios
La menstruación o período, es el sangrado vaginal normal que ocurre como parte del ciclo mensual de la mujer. Todos los meses, su cuerpo se prepara para un posible embarazo. Si esto no ocurre, el útero, se desprende de su recubrimiento. Esta es la sangre menstrual, que sale del cuerpo a través de la vagina. Esta sangre es parte sangre y parte tejido del interior del útero.
Los períodos suelen comenzar alrededor de los 12 años y continúan hasta la menopausia, cerca de los 51 años. La mayoría de las menstruaciones dura entre tres y cinco días. Además del sangrado, usted puede sentir:
El síndrome premenstrual es un grupo de síntomas que comienza antes de la menstruación. Puede incluir síntomas emocionales como físicos.
Consulte a su proveedor de cuidados de salud si usted experimenta grandes cambios en su ciclo. Esto puede ser un signo de otros problemas que quizás deban ser tratados.
Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano
Un aborto espontáneo es la pérdida del embarazo antes de la semana 20 del embarazo. La mayoría de los abortos espontáneos ocurren muy temprano en el embarazo, a menudo antes de que la mujer sepa que está embarazada.
Las causas de los abortos espontáneos incluyen:
Los signos de un aborto espontáneo pueden incluir manchado vaginal, dolor abdominal o calambres y fluidos o tejidos que salen por la vagina. El sangrado vaginal puede ser un síntoma común de un aborto espontáneo, pero muchas mujeres tienen un poco de sangrado al comienzo del embarazo sin ser un aborto espontáneo. Para estar segura, llame a su proveedor de cuidados de salud inmediatamente si presenta sangrado.
Las mujeres que sufren un aborto espontáneo en las etapas tempranas de su embarazo en general no necesitan tratamiento. En algunos casos, tejido queda en el útero. Los médicos usan un procedimiento llamado dilatación y curetaje o medicinas para eliminar el tejido.
La asesoría psicológica puede serle de ayuda para enfrentar el duelo. Más adelante, si decide intentar el embarazo de nuevo , trabaje junto al proveedor de atención médica para disminuir los riesgos. Muchas mujeres que pierden sus embarazos continúan teniendo bebés sanos.
NIH: Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo
Existen muchos problemas que pueden impedir que una mujer disfrute de las relaciones sexuales. Estos incluyen:
Estos problemas pueden tener causas físicas o psicológicas. Las causas físicas pueden incluir enfermedades como diabetes, insuficiencia cardiaca, trastornos nerviosos o problemas hormonales. Algunas drogas también pueden afectar el deseo y la función. Las causas psicológicas pueden incluir estrés relacionado con el trabajo y ansiedad. También depresión o preocupaciones sobre problemas maritales o de relaciones. Para algunas mujeres, el problema es resultado de traumas sexuales en el pasado.
Los problemas ocasionales con la función sexual son comunes. Si sus problemas duran más de algunos meses o generan angustia en usted o en su pareja, debe acudir a un profesional de la salud.
Tanto el aparato reproductor femenino como el masculino cumplen un papel en el embarazo. La exposición a ciertas sustancias o agentes puede causar problemas al sistema reproductivo y pueden afectar la fertilidad y la posibilidad de tener un bebé. Algunos riesgos para la reproducción incluyen:
En los hombres, estar expuesto a un riesgo para el sistema reproductor puede afectar el esperma. En las mujeres, un riesgo puede causar diferentes efectos durante el embarazo, dependiendo del tiempo de exposición al mismo. Si la afecta durante los primeros tres meses del embarazo, este riesgo puede causar un defecto congénito o de nacimiento o un aborto espontáneo. Si la afecta durante los últimos seis meses, puede retrasar el crecimiento del feto, afectar el desarrollo de su cerebro o llevar a un parto prematuro.
La urología (del griego οὖρον - oûron, "orina" y -λογία, -logia "estudio de") es la especialidad médico-quirúrgica que se ocupa del estudio, diagnóstico y tratamiento de las patologías que afectan al aparato urinario, glándulas suprarrenales y retroperitoneo de ambos sexos y al aparato reproductor masculino, sin límite de edad.
Se considera a Francisco Díaz (Alcalá de Henares 1527 - Madrid 1590) autor del primer tratado de urología, reconocido internacionalmente como “Padre de la Urología universal”.
Su nacimiento se remonta a la segunda mitad del siglo XIX como subespecialidad de la Cirugía general. Esta separación se debió fundamentalmente a tres factores::
La urología incluye distintas subespecialidades.
La andrología es la parte de la urología encargada del estudio, investigación, y exploración de cualquier aspecto relacionado con la función sexual y reproducción masculina.
Los principales problemas de los que se encarga la andrología son los trastornos de erección, otros trastornos sexuales del varón y la infertilidad masculina.
De los aspectos relacionados con enfermedades del aparato genitourinario masculino se encarga la urología.
Laparoscopia urológica o urolaparoscopia es una rama de reciente aceptación en la Urologia. Clayman en Norteamérica realizo la primera nefrectomia Laparoscopica. A partir de allí de ha venido ampliando su uso, al grado de que los procedimientos que se llevaban a cabo con Cirugia abierta, ahora casi en su mayoría se pueden realizar por Laparoscopia. Su progreso ha sido distinto en los diversos países, pero a la fecha se realiza de manera global.
La urología oncológica, oncología urológica o uro-oncología es la especialidad médica que estudia los tumores benignos y malignos, pero con especial atención a los malignos, esto es, al cáncer, centrada en el aparato reproductor masculino.
Son el conjunto de maniobras diagnósticas o terapéuticas,transuretrales o percutáneas, endoscópicas o imagenológicas, realizadas en la luz de las vías urinarias. Algunos autores la definen como cirugía ´Mínimamente invasiva¨.
La urología pediátrica es aquella subespecialidad médica dedicada a estudiar las enfermedades del sistema reproductor de los niños y bebés.
La urología geriátrica es aquella subespecialdad médica dedicada a estudiar las enfermedades del sistema reproductor de los ancianos.
La urología de la litiasis o urolitiasis es aquella subespecialidad (en algunos países se utiliza mejor el término superespecialidad para referirse a un apartado concreto de una especialidad) que se encarga del estudio, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades que se manifiestan con formación de cálculos urinarios (piedras o concreciones). Los cálculos pueden formarse en cualquier punto de la vía urinaria, desde las cavidades del riñón a la uretra, conformando lo que se ha llamado "mal de piedra". Las localizaciones más comunes son riñón, uréter y vejiga. La composición más frecuente es el oxalato cálcico. La urolitiasis constituye uno de los apartados más clásicos de la urología. Los primeros casos conocidos se remontan a las antiguas civilizaciones de Egipto y América precolombina. En excavaciones arqueológicas se han hallado momias con restos litiásicos en riñones y en vejiga. Durante la edad media y el renacimiento los litotomistas (personas con habilidad para extraer cálculos de vejiga o litotomía) difundieron los primeros tratamientos quirúrgicos frente a esta enfermedad. La cirugía abierta fue la terapia convencional de la urolitiasis hasta llegar a su auge a mediados del siglo XX. En los años 70 de dicho siglo apareció la litotricia extracorpórea por ondas de choque (LEOC), capaz de fragmentar los cálculos sin necesidad de cirugía, aunque no haya resultado eficaz en todos los casos. Por ello se ha ido consolidando el tratamiento de la urolitiasis mediante endourología, con técnicas como la ureterorrenoscopia y la cirugía percutánea, que no han cesado de evolucionar. La aparición de endoscopios flexibles, sistemas digitales de visualización y pincería de gran precisión, así como el empleo de energías neumática, ultrasónica o láser hacen posible la fragmentación y extracción de las concreciones en la mayoría de casos. Pese a estos avances no existe en la actualidad un tratamiento farmacológico eficaz que evite la formación de los cálculos urinarios.